12 de marzo, 2020

EL PODER DE SER AUTÉNTICO

Massimo Forte

Carla Costa na praia

 

Trabajar en el mercado inmobiliario supone elegir trabajar con personas. Clientes compradores y clientes vendedores. Españoles y extranjeros. Hombres y mujeres. Parejas y solteros. Familias y viudos. Empresarios e inversores. Compañeros y trabajadores. Brokers y asociados. Proveedores y formadores. Colegas de otras agencias.

Varios tipos de personas. Todas únicas. Con historias, papeles y necesidades distintas.

Como Massimo dice, este es un negocio de personas para personas.

¿Y qué es lo que une a las personas? Habrá diferentes opiniones sobre lo que es más importante a la hora de crear relaciones con las diferentes partes interesadas de este mercado. Lanzo un desafío.

Vamos a simplificarlo teniendo en cuenta esta premisa:

“Para que un agente construya una buena reputación y para que tenga éxito en el mercado inmobiliario es fundamental crear relaciones de valor y de confianza”.

Tal como una planta necesita que la rieguen para crecer sana, las relaciones también tienen que ser nutridas. Creo que hay un elemento que marca la diferencia por completo en este proceso de cuidad y construir relaciones de valor: la autenticidad.

Un agente inmobiliario que es auténtico asume la fuerza de su Marca Personal. Es un profesional que tiene consciencia de su ADN y de su propuesta de valor. Respeta su propia esencia. Tiene una comunicación clara de aquello que desea alcanzar y sabe comunicarlo de forma coherente y alienada.

Ser auténtico implica tener en cuenta cinco conceptos: Reflexiona sobre ellos y piensa en aquello que podrás poner en práctica para construir una Marca Personal auténtica.

 

Autoconocimiento 

¿Cómo puedes ser auténtico si no sabes quién eres? ¿Si no tomas consciencia de tu mundo intangible? Los valores que rigen tus acciones. La misión y la visión que quieres alcanzar. Las características diferenciadoras de tu personalidad. Los puntos fuertes y aquellos en que debes trabajar. Las capacidades técnicas (hard skills) y habilidades básicas (soft skills).

Hacer un autoanálisis es el primer paso para el proceso de autoconocimiento y alineamiento de la marca personal.

Consejo: Pare. Reserva tiempo para ti. Escribe en un papel cuáles son tus valores, misión y visión profesional. ¿Por qué haces lo que haces? 

 

Empatía

Este concepto remite directamente a la creación de relaciones. El negocio no se basa en ti. Se basa en cómo poder estar al servicio del prójimo. Comprenderlo. Escucharlo activamente. Entender sus necesidades. Ayudar a encontrar una solución

Consejo: Visualiza un escenario con tu cliente ideal. ¿Cómo sería la interacción? ¿Cómo la empezarías, desarrollarías y terminarías? ¿Qué podrías añadir a vuestra conversación que sea relevante, coherente y valioso? El objetivo es aumentar el nivel de confianza con la persona.

 

Lenguaje

Adecuar la comunicación a la persona que la que está creando una relación es fundamental. Siempre respetando su esencia. Va más allá de dominar la lengua materna de un cliente extranjero. Está relacionada con gestos y actitudes. Con el comportamiento. Lenguaje verbal y no verbal. Imagen exterior. Todo comunica. Todo emite un mensaje.

Consejo: ¿Existe algún aspecto de tu comunicación externa que te gustaría mejorar? ¿Tu dicción o discurso? ¿Tu fluidez en un idioma? ¿Tu presentación / imagen? 

Si has identificado algo, pide ayuda. Consulta un especialista en comunicación o en consultoría de imagen.

 

Proximidad 

Las relaciones de confianza no se crean con barreras. La proximidad está relacionada con la disponibilidad y con se accesible de acuerdo a tu esencia. Tiene que ver con estar al servicio de alguien. Cuando estás próximo, significa que estás disponible y receptivo a ayudar.

Consejo: Evalúa tu nivel de proximidad en una escala de 0 a 10. ¿Estás satisfecho o te gustaría aumentar tu nivel? ¿Qué tienes a tu alcance? ¿Ser más atento? ¿Potenciar tu estrategia de CRM? ¿Explorar nuevas herramientas o canales de comunicación? Define, implementa y evalúa el resultado.

 

Flexibilidad

Ser flexible significa tener libertad para ser adaptable. Significa encontrar nuevas perspectivas e ir al encuentro del otro. Va más allá de vender. Desbloquear asuntos y encontrar soluciones.

Consejo: Evalúa tu nivel de proximidad en una escala de 0 a 10. Evalúa si estás satisfecho.

Pregúntate qué podrías mejorar o alcanzar en tus relaciones profesionales que aumentase tu nivel de flexibilidad. Sé creativo y piensa de qué forma podrías hacerlo.

 

Cuando estamos inseguros o incómodos, consciente o inconscientemente, es ese el mensaje que transmitimos. Del mismo modo que, cuando estamos seguros y cómodos, las otras personas lo sienten.

 

Recuerda: ser auténtico es la calidad más preciosa de cualquier marca o negocio.

 

Carla Costa

Especialista en Marca Auténticas

www.carlacosta.com.pt

 

Partilhe a sua opinião